Turistas ricos exigen levantar un muro en el Centro para que no les molesten los sevillanos
Un muro al estilo Trump o como el de Gaza o como el de la Macarena, pero que sea infranqueable con guardias apostaos en las almenas armados de malaje hasta los dientes. Así es, más o menos, como han esbozado sus exigencias discriminatorias la Asociación de Enamorados de Sevilla sin Sevillanos.
«Este grupo de turistas asiduos y jartibles de nuestra ciudad son, en su mayoría, millonarios y gente en el taco, que lo que busca sin duda es o mejor para nuestro turismo y nuestra economía. Así que si dicen de construirle un muro pues yo lo veo con mis socios del PP y de Ciudadanos y me pongo a ello, miarma.» Señala el alcalde la mariana ciudad de Sevilla, Juan Espadas Láser.
La asociación de guiris ricos, AESS, sostiene en su comunicado que «no es que tengamos nada contra los sevillanos, si en el fondo son muy simpáticos y cantan muy bien y esas cosas, pero para sólo un ratito…» La AESS continúa en su nota advirtiendo que «sin ellos Sevilla se vendría abajo como una derbi, así que el ABESÉ, el Diario de Sevillanía y to quisqui a chistar y a cocinarnos tapitas, limpiarnos las habitaciones o los zapatos, pasearnos en caballo y tocarnos flamenco que para eso hemos venío y nos hemos casi quedao aquí.»
Las asociaciones de sevillanos de todos los colores, las hermandades, el Betis y el Sevilla han decidido «no meterse en lo que no le llaman, aunque esto les incumba directamente, pues es tradición de la gente de bien que lee el ABESÉ, no morder la mano que le da de comer y mirar pa otro lao para chapotear en la miseria como Dios manda y el arzobispo inmatricula. Amén.»
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