Los Reyes dicen que «a Sevilla este va a ir Papá Noel con tos sus renos»
Tras el último éxito cosechado por Santa Claus en la Noche Buena de este último saturday night, los Reyes Magos de Oriente están que trinan. «Nos parece muy bien que haya tantos niños sumándose a la moda de pedir los regalitos a Papá Noel cada 25 de diciembre. Pues si está tan de modé que vaya él a Sevilla Este con tos sus renos, home ya… » Señala Melchor king, rey de Oriente próximo.
«Nos llevamos medio año para repartir regalos por todo el mundo con los camellos, los pajes y toda la pesca… y el otro medio lo usamos exclusivamente para viajar a Sevilla Este, porque somos buena gente… ¿pero ahora… no os gusta tanto el jalowín y la blanca Navidad del coca-cola? San Nicolás, Santa Claus… Pues venga… que vaya Papá Noel, si tiene renos…» Declara su majestad Baltasar, rey del lejano Oriente, en pleno subidón de mirra.
«A ver si al hippster viejuno este le alcanza la pasta que le da Maduro para llevar tanto Barón Dandy, tanta camisita espagnolo o tanta uñita de porcelana que nos piden desde aquel barrio del otro mundo…» Insiste su majestad, Gaspar, rey del Oriente Medio e inventor del incienso ese que tanto nos gusta.
Los niños de Sevilla Este se muestran consternados con la nueva situación a la que se ha llegado, con la irrupción de Santa Claus en el viejo panorama navideño. De hecho, temen que su mercancía fantasía no les llegue a tiempo o que el carbón encendido se lo fundan los renos a lo largo del larguísimo camino que lleva a sus pisos. Todos ellos se han prestado a sacar sus walky-talkys a la calle y sus vasitos de yogurt atados con una tansa, para hacer un llamamiento a los chavales del más acá, los de la Sevilla de toda la vida: «Por favor, niños normales, aprovechad que la cabalgata pasa por vuestras tierras para recordar a sus majestades que nadie les ha votado para que calienten el trono oriental eternamente. Decidle que Santa Claus viene con las rebajas y con la república debajo del brazo. Así que menos tirar caramelitos de cajasol y más trabajar por los niños del más allá, que son los que realmente lo necesitan.»
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