Descubren a Rajoy infiltrado entre los Seises de la Catedral
Sevilla ha vivido esta mañana un momento histórico en su Catedral. Nada más y nada menos que el presidente de España, Mariano Rajoy, era descubierto camuflado entre los Seises que danzaban y cantaban en el Altar Mayor. Según afirman algunas fuentes, Rajoy aprovechaba su minivacación anoche en Doñana para marchar esta mañana a Sevilla y seguir desaparecido entre los niños cantores de Sevilla, una de las agrupaciones musicales más seguidas por los correligionarios de su partido.
Al parecer, el presidente no quería llamar la atención, más bien pasar todo lo desapercibido posible, “pero se podía haber afeitao esa barba de algofifa vieja al menos, miarma” –apunta Sinforosa de la Perla, una simpática señora que va a ver estas cosas-. “Tampoco es que tuviera mucho ángel con las casta-ñuelas. Nachete, el más pequeño de los niños, se nos ha hecho de vientre en los gayumbos, el pobrecito… Y es que tenía al mismo presidente detrás en la formación y ese hombre tan grande, con esas eses que pronuncia… claro, nos tenía al niño acojonaito” –señala Guillermo Libdeno, coreógrafo de este antiquérrimo coro infantil-.
Según el gabinete de la misma presidencia, la presencia de Rajoy entre los Seises se debe a que este no tenía muy claro la apariencia de los jóvenes hipsters y con aquello de buscarles el voto ha acabado con “unos chavales igualmente estrafalarios, solo que con mucho menos pelo en la cara y sin edad para votar”.
Francisco Marhuenda por su parte, ya ha apuntado en la tertulia de l COPE “que es innegable el grácil manejo de la castañuela del candidato del PP, el porte con el que lucía su traje de efebo dieciochesco, su destreza de danzarín galaico, y especialmente, su canto de sirénido popular que nos transporta a los campos de la gloria. En serio”.
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